La muerte a tiros del niño de 15 años de nombre Luis Ángel Vargas Salgado ocurrida el pasado 14 de septiembre que acusa a un oficial de la Policía Nacional aumentará a dos agentes más, informaron ayer autoridades del Ministerio Público de Nicaragua.
Esto se debe porque serán implicados en el caso de la muerte de Vargas Salgado que dejó como resultado agregado el pasado 15 de septiembre, la destrucción total de la estación policial ubicada en La Paz Centro a manos de los pobladores amigos de la familia del occiso que molestos demolieron y prendieron fuego al edifico policial.
Los agentes Norwin Samir Sevilla Hernández, de 29 años y Juan Ramón Briones Hernández de 52 serán quienes compartirán con el agente Denis Antonio Cano Sánchez la acusación de “abuso de autoridad” por compartir la patrulla con Cano Sánchez, asimismo el agente Nedar Hernández por supuestamente dar la orden de capturar al menor.
Los tres oficiales policiales afrontarán también acusaciones por “allanamiento ilegal de morada”. Los acusados serán procesados en los tribunales del departamento de León, al occidente de Nicaragua en Centroamérica.
Luis Ángel Vargas Salgado falleció por una hemorragia interna después de un balazo por la espalda en la zona izquierda del tórax.
Sobre la muerte de orto menor
La Directora de la Policía Nacional, primera comisionada Aminta Granera, visitó en el barrio Carlos Fonseca ubicado en la capital, fue a la casa de Alma Cruz, madre de otro menor de 15 años que supuestamente falleció a balazos por agentes policiales.
Granera dijo a la madre de Robleto Cruz que si los oficiales fueron responsables de la muerte de su hijo el caso será llevado con justicia. Todavía el peritaje balístico no ha presentado un resultado sobre a quién le pertenece la autoría del disparo.
Hasta el momento se encuentran suspendidos dos oficiales, que son los involucrados en el asesinato de Robleto Cruz.