¡Hola!
Puedes iniciar sesión,
si no tienes cuenta crea una
publicidad

Portada » Internacional
 
actualizado 25 de octubre 2013
Barack Obama apresura a republicanos para aprobar reforma migratoria
Que beneficiaría a millones de inmigrantes indocumentados
Cables
Translate

» Los indocumentados esperan con ansias la esperada reforma migratoria de Barack Obama.

foto

 

WASHINGTON- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, hizo el llamado a aprobar la reforma migratoria a 60 días antes que termine este año, porque "es buena para la economía y para la seguridad nacional", y "es lo que hay que hacer", dijo.

"Una clara mayoría de los estadounidenses apoya la reforma, todos ganamos si se aprueba", insistió el mandatario, exhortando nuevamente al Congreso a la acción, para que apruebe una nueva ley. "No tiene sentido tener 11 millones de personas que están en este país ilegalmente y sin ninguna manera de salir de las sombras", dijo.

A finales de junio el Senado, donde los demócratas hicieron un recuento con mayoría, aprobó un proyecto bipartidista que agrega un camino para otorgar, bajo una serie de condiciones y al término de un período transitorio, la ciudadanía estadounidense a varios millones de inmigrantes indocumentados, en su mayoría de origen latino.

Por su parte, la Cámara de Representantes, que tiene el dominio por los republicanos, sostuvo que debatiría un plan propio, sin garantizar sin embargo que éste incluya una vía para legalizar a los indocumentados. Los republicanos consideran la vía a la ciudadanía como una amnistía para quien vive ilegalmente en el país.

"Es tiempo de una reforma migratoria, este es el momento en el que debemos ser capaces de hacer el trabajo", insistió desde la Casa Blanca el mandatario, acompañado por el vicepresidente Joe Biden y rodeado por activistas de organizaciones pro inmigrantes.

El inquilino de la Casa Blanca reiteró que es necesario "arreglar el sistema roto de inmigración" y pidió que demócratas y republicanos trabajen juntos, recordando cómo la reforma ha sido negociada por años y que líderes de ambos partidos han trabajado en ella. "Este es el momento en que deberíamos concretarla", dijo.

"Creo que esta reforma no debe ser demócrata, republicana, independiente sino bipartidista, por el bien del país", dijo. "Si hay una razón para no aprobar esta reforma de sentido común yo todavía no la he escuchado", remarcó.

"Ahora le toca a la mayoría republicana en la Cámara de Representantes decidir si la reforma se convierte en realidad o no", agregó Obama, intensificando la presión sobre el liderazgo republicano y remarcando cómo no se puede dejar el problema para que otro lo resuelva alguna vez en el futuro.

Tanto Obama como los demócratas sostienen que tienen los votos suficientes en el pleno de la Cámara para aprobarla.

Para los partidarios de la reforma, la legalización de millones de indocumentados hará crecer la economía y reducirá el déficit. "Porque tenga amplio apoyo no significa que se hará, esto es Washington después de todo", agregó el presidente, aludiendo a cómo alguna gente piensa que si él lo apoya entonces hay que oponerse. "Pero les recuerdo que mi predecesor republicano también estuvo a favor," remarcó Obama, insistiendo en la necesitad de continuar la presión para lograr la reforma antes de que termine el año.

Comentarios
El diario La Jornada insta a los lectores a dejar sus comentarios o quejas al respecto del tema que se aborda en esta página, siempre guardando un margen de respeto a los demás. También instamos a reportar las notas que no sigan las normas de conducta establecidas. Donde está el comentario, clic en Flag si siente que se le irrespetó.
©2012 La Jornada. Una empresa del grupo Arévalo-Garméndez. All Rights Reserved.