El presidente costarricense Luis Guillermo Solís precisó que los contenciosos fronterizos que mantienen ambos países no son temas menores, pero que es necesario "entender, con un pragmatismo inteligente, que nuestros pueblos tienen interacciones que van mucho más allá de los problemas fronterizos mismos".
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El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, utilizó el término "desanjuanizar" para referirse a las futuras relaciones entre Nicaragua y Costa Rica . Fue más allá y habló de "pragmatismo inteligente" que sea un factor distinto y pueda ver más allá de los conflictos limítrofes para cooperar en temas de interés común, declaró a periodistas durante una visita a EE.UU. El presidente costarricense Luis Guillermo Solís precisó que los contenciosos fronterizos que mantienen ambos países no son temas menores, pero que es necesario "entender, con un pragmatismo inteligente, que nuestros pueblos tienen interacciones que van mucho más allá de los problemas fronterizos mismos".
"Yo he clamado desde hace años por 'desanjuanizar' la relación, aludiendo al Río San Juan que forma parte de buena extensión de nuestra frontera. Y creo que ese concepto alude a la necesidad de separar lo que tiene que ver con frontera de lo que tiene que ver con conveniencia comercial", afirmó Solís. El presidente tico no visitó Nicaragua antes de asumir el poder ya que en ese momento le parecía "indebido" visitar el país "mientras Nicaragua mantuviera la posición que mantiene después de haber invadido territorio costarricense".
"Pero tenemos que garantizar, tanto ellos como nosotros, que la agenda binacional, que es compleja, sigue atendiéndose debidamente por vía diplomática o comercial o de seguridad", señaló.
El mandatario recordó que Nicaragua exporta una buena parte, si no la mayor parte, de su producción por puertos costarricenses en el Caribe, mientras Costa Rica exporta a Nicaragua más de US$700 millones al año y muchos millones de dólares en remesas de más de 400.000 nicaragüenses que viven en Costa Rica.
"Habría que estar loco para no entender la necesidad de un trabajo cálido y cercano para la atención de las necesidades de la gente", dijo. "Ahora, esto no obsta para mantener una posición absolutamente clara, contundente, en materia fronteriza".
"Pero tenemos que buscar una cierta flexibilidad para el manejo de estos otros temas y creo que existe la voluntad y la lucidez en ambos Gobiernos para hacerlo".
El nuevo presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, es de la tendencia del centro-izquierdista Partido Acción Ciudadana (PAC) y mantiene ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) los conflictos limítrofes con el país vecino,del cual dijo que la primera de las demandas probablemente se resolverá en alrededor de un año.
La CIJ, con sede en La Haya, tramita en un solo expediente dos casos entre Costa Rica y Nicaragua. El primero de ellos referido a una acusación presentada en el 2010 por Costa Rica sobre daños ambientales y la supuesta invasión de militares y civiles nicaragüenses a una zona de la costa caribeña que ambos países reclaman como propia.
Costa Rica llama ese lugar Isla Portillos o Isla Calero, mientras su vecino afirma que se trata de Harbour Head.El segundo caso es una demanda interpuesta por Nicaragua contra Costa Rica en el 2011 por supuestamente causar daños ambientales al río San Juan, de soberanía nicaragüense, durante la construcción de un camino de lastre de unos 160 kilómetros paralelo al afluente.
En febrero pasado, Costa Rica también presentó a la CIJ otra demanda contra Nicaragua, para que los jueces establezcan los límites marítimos entre ambos países tanto en el Caribe como en el Pacífico.
