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La Jornada
 
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actualizado 1 de marzo 2010

 
Luego del terremoto, olas gigantes se llevaron Iloca
 
ANSA  
(foto Ansa)

SSuceso provocó centenares de muertos

ILOCA, CHILE- Las olas gigantes que se abatieron el sábado sobre el balneario de Iloca y la costa chilena minutos después del terremoto nocturno, provocaron la muerte a cientos de personas y un número indeterminado de desapariciones que superarían las cifras oficiales del megasismo.

En la costa chilena de las ciudades asoladas por el terremoto es posible observar centenares de casas arrastradas por el mar junto a personas, vehículos, animales, enseres y que borró los caminos turisticos de balnearios que nunca volverán a ser iguales.

La cifra oficial de muertos, pero sobre todo la de desaparecidos, aumentará cuando se cuente con información exacta de lo ocurrido en la costa chilena.

Iloca, 240 kilómetros al sur de Santiago, es un balneario desaparecido donde los habitantes sepultan sus muertos, buscan a los desaparecidos, cuidan los heridos, retiran escombros y vuelven a sus casas a rescatar enseres y cuidarse de saqueos.

"Fueron tres olas grandes que se llevaron la feria artesanal, un circo y toda le gente que había allí, incluyendo los animales", dijo un habitante de Iloca.

"Los cerros se movían también y allí tampoco teníamos seguridad", siguió el relato.

Los damnificados viven en carpas en los cerros y vuelven abajo a rescatar cosas.

El temor a nuevos tsunamis permanece en las poblaciones costeras al punto que hoy en Valparaíso, 120 kilómetros al oeste de Santiago, un falso rumor de tsunami llevó a miles de personas a huir y subir alocadamente hacia los cerros de ese puerto.

El rumor cundió luego que el ministro de defensa, Francisco Vidal, admitió que el sábado la Armada cometió un error al no reconocer la existencia de un tsunami, aunque luego se corrigió, admitió el hecho y alertó a la población "salvando miles de vidas", dijo el secretario de Estado.

En el puerto de Constitución, 300 kilómetros al sur de Santiago, hay manzanas completas en ruinas, los principales edificios y muchas casas (60%) están en el suelo y no hay energía eléctrica, ni agua y son escasos los alimentos produciéndose algunos asaltos a supermercados.

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