Tras varios días de ansiosa espera de la dirigencia Católica y de los feligreses, el principal sospechoso que asesinó al párroco de la Iglesia Inmaculada Concepción de La Concha del departamento de Masaya, Marlon Ernesto Pupiro García, ha sido capturado.

Yasker Blandón Tórres, de 34 años, fue detenido por agentes de la Policía Nacional y será presentado ante la Fiscalía General de la República, informó el portavoz policial Comisionado Mayor Fernando Borge. El funcionario dijo que Blandón “será puesto (hoy lunes) a la orden del Ministerio Público por asesinato y robo agravado”.

Fue arrestado cuando estaba donde un familiar a eso de las 9 en punto de la mañana en el barrio Sierra Maestra, de Managua. El hecho fue manipulado de manera hermética por la institución policial.

El supuesto viaje de Blandón a Costa Rica para huir del delito cometido seguramente no ocurrió a como se rumoraba. Según fuentes oficiales el móvil del delito fue el robo de la camioneta Mitsubishi que manejaba la víctima.

Cuando ocurrió el hecho los agentes policiales se dirigieron al restaurante La Borgoña donde Blandón laboraba como mesero y donde se daría inicio el sangriento delito.

La muerte del párroco ocurrió por asfixia, de acuerdo al dictamen del Instituto de Medicina Legal (IML). El cuerpo putrefacto del Padre Pupiro fue localizado en el kilómetro 16.5 al oeste de Managua envuelto con bolsas negras.

Feligreses denuncian persecución

El momento que la Policía estaba reconstruyendo el crimen en La Borgoña con la presencia de Blandón, causó que varios feligreses rodearan el negocio campestre gritando “justicia” contra el posible autor de los hechos.

De acuerdo a los seguidores católicos lo ocurrido con el sacerdote Pupiro es una persecución que se hace contra la Iglesia en Nicaragua. Intentamos conocer a profundidad pero no se lograron datos contundentes que esto suceda en nuestro país.