RUSELAS - Los mandatarios de Estado y de Gobierno de la eurozona llegaron a un acuerdo con inversores privados para que los empresarios acuerden unas pérdidas de un 50% en sus bonos con Grecia como parte de un plan que rebajaría la carga de deuda de ese país con la intensión de retener una crisis en la zona euro que ya lleva dos años.
El trato se logró después de ocho horas de negociaciones entre banqueros, jefes de Estado, banqueros centrales y el Fondo Monetario Internacional (FMI), para frenar los problemas de deuda que han empezado con destruir el proyecto de la moneda única europea.
De al acuerdo, el sector privado aceptó voluntariamente un recorte nominal del cincuenta por ciento en sus inversiones en bonos para bajar la carga de deuda de Grecia hasta en 100.000 millones de euros. Esto bajaría las deudas de Atenas a un 120 por ciento de su Producto Interior Bruto (PIB) para el año 2020, contra el 160 por ciento actual.
También se espera que la zona euro aportará "mejoras crediticios" al sector privado que estaría por encima de los 30.000 millones de euros.
El punto estaría por completar las negociaciones del paquete a finales de año, con el objetivo que Grecia tenga un segundo programa de ayuda financiera antes de 2012.
El valor de ese paquete, según las fuentes europeas, estaría rondando los 130.000 millones de euros – contra los 109.000 millones de euros retenidos en un acuerdo que se desmoronó.
"La cumbre nos permitió adoptar los componentes de una respuesta global, de una respuesta ambiciosa, de una respuesta creíble a la crisis que está golpeando a la zona euro", manifestó el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy.
El acuerdo para abordar la participación del sector privado en Grecia surgió después de que Sarkozy y la canciller alemana, Angela Merkel, se relacionaran personalmente en las negociaciones con los banqueros.