El embajador de Francia en Nicaragua, Antoine Joly, externó su posición acerca del aborto terapéutico que estuvo aceptado en el Código Penal desde hace más de 100 años en la etapa del gobierno liberal de José Santos Zelaya, pero fue derogado por presión política y religiosa antes de las elecciones de Noviembre del 2006, que le dio el triunfo al actual presidente Daniel Ortega Saavedra.
El diplomático ante las mujeres del Movimiento Autónomo de Mujeres, MAM, que hacen campaña en contra del gobierno del presidente Ortega para restituir la norma penal abolida por liberales y sandinistas, escribió textualmente lo siguiente después de reunirse con las dirigentes del MAM : “ Con el debido respeto a las convicciones religiosas y filosóficas, considero que la cuestión del aborto es tanto una cuestión de vida privada como de vida pública”
La Iglesia Católica hace una fuerte y tenaz resistencia hacia los grupos que hacen labor a favor del aborto terapéutico ya que considera que matar un feto es un homicidio a un ser vivo a las pocas semanas de haberse dado el engendro. En esa labor apoyan a los católicos las iglesias evangélicas del país.
El diplomático dijo que en su país el tema fue discutido ampliamente pero que hay una ley del año 1974 que fue aprobada para darle curso a la norma ahora aceptada entre políticos de izquierda y derecha.