La roqueta es una planta anual de pelos rígidos, que crece en la región mediterránea, de la familia de las Brassicáceas o Crucíferas según los autores. Sus hojas son parecidas a las de los rábanos y a las de los nabos, botánicamente muy próximas, y tienen un sabor picante de pimienta.

Su tallo es poco ramificado, bastante delgado pero duro, puede alcanzar 1 metro de largo. Sus hojas tienen formas que varían según la edad de la planta y el individuo; su forma es alargada y su limbo cortado en lóbulos , siendo el último notablemente más largo. Sus flores son típicas de las Crucíferas con sus 4 pétalos dispuestos en cruz, tiene un color blanco crema con una superficie portando venas violáceas. Los frutos son silicuas espesas terminadas por un pico, y contienen semillas pardas.

Las hojas tiernas consumidas en ensalada tienen un gusto aromático, un poco picante y refrescante. Se cosechan las hojas tiernas que se utilizan en las pastas, el risotto, el pesto, las sopas y los guizados, o en ensalada, sóla o mezclada. Las semillas pueden ser utilizadas como las de la mostaza; de ellas se puede extraer un aceite empleado en ciertos países para la cocina. En francés esta planta se llama “roquette” o “rouquette”. En inglés se llama “Rocket”.

Desde el punto de vista medicinal, la roqueta es diurética y estomacal, antes se consideraba como afrodisíaca.

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