Ayer Martes Santo mientras los calores eran muy intensos entre 28 y 30 grados centígrados, se reporta que cayó en la ciudad de Estelí, al noreste de Nicaragua a 150 kilómetros de Managua la capital, una fuerte tormenta de granizo que afectó 17 viviendas y tres templos evangélicos. También se informó que llovió en las ciudades de León y Chinandega en pleno verano.

A inicio de la década del 90 se recuerda que en Managua, una zona caliente por excelencia, cayó granizo y afectó en esa ocasión parcialmente los techos donde se ubica el reparto San Antonio.

Sobre estos fenómenos el autor del libro de secundaria, Geografía de Nicaragua, el astrónomo Jaime Incer Barquero dijo que el origen del fenómeno atmosférico lo provocó el calor intenso. Después de una descarga eléctrica vino un aguacero y luego una granizada informaron los pobladores del sector.

Incer dijo que lo sucedido en Estelí “ se debe a un rápido calentamiento de las nubes que van ascendiendo. En la medida en que ascienden se van enfriando, y el vapor de agua se solidifica en hielo y cae en forma de granizo”, dijo Incer a un medio local. Los fenómenos se dan en áreas muy reducidas que han sufrido un extraordinario calentamiento durante todo el día, dijo.

Las lluvias que cayeron en la madrugada de ayer en el Occidente del país tienen su origen según informó Metereología del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales, INITER, a un “eje de vaguada débil”. Las lluvias podrían prolongarse por 24 horas y se calcula que cayeron 0.3 milímetros de lluvias en los lugares donde cayó la lluvia. Oficialmente Albania Cordonero de la INITER no tiene datos de la caída de granizo en Estelí porque no hay estación en esa zona.