Cuba y Nueva York, a siete días del paso de la tormenta de Sandy, enfrenta los retos de reconstruirse poco a poco y ante las nuevas circunstancias de fuerza mayor que se presenten.

En Nueva York una ola de frío azota a la población que perdió sus viviendas con el paso del fenómeno natural, y dicha situación perjudica las labores de reconstrucción, indicaron fuentes oficiales.

Solo en la ciudad de Nueva York se calcula que más de 30 mil personas con casas destruidas. Así lo señaló en rueda de prensa el alcalde, Michael Bloomberg, que detalló que la situación en la costa es mucho peor que en las zonas del interior del Estado, donde basta con recuperar el tendido eléctrico derribado por árboles.

Conscientes del intenso frío que se ha apoderado de la región, las autoridades locales exploran ya “todas las opciones” para dar cobijo a los afectados por 'Sandy'.

“Nadie ha logrado alojar a todo este número de personas de la noche a la mañana. Supone un auténtico reto”, dijo Bloomberg.

El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, coincide en que albergar a tantas personas en zonas seguras será complicado. “Tenemos un enorme problema de vivienda2, admitió.

Las previsiones meteorológicas no resultan alentadoras de cara a los próximos días. Para el miércoles y el jueves se esperan lluvias e incluso algunos copos de nieve como parte de una tormenta invernal que también podría causar ligeras inundaciones en las zonas costeras.
Cuba recibe apoyo

Mientras tanto los cubanos reportan mayor destrucción en Santiago de Cuba, donde se han enviado apoyo de países aliados entre ellos Venezuela y Ecuador.

María Bueno Oñate, delegada del Ministerio de Comercio Exterior e Inversión Extranjera en Santiago de Cuba, detalló que han recibido como ayuda humanitaria 250,6 toneladas de alimentos y materiales de construcción.

Para este lunes 5 de noviembre está prevista la llegada de la primera donación procedente de Ecuador, y el miércoles 7 la entrada de un buque venezolano al puerto Guillermón Moncada, de Santiago de Cuba, detalló Bueno Oñate.

Brigadas de trabajadores de todo el país se movilizaron para las provincias orientales y ahora apoyan el restablecimiento de los servicios de comunicación y electricidad en las edificaciones, mientras los principales dirigentes del gobierno supervisan las distintas acciones.