WASHINGTON - Sólo después de difundirse un borrador de la Casa Blanca con respecto a la reforma migratoria, que daría permiso a los indocumentados obtener la residencia permanente legal en Estados Unidos en unos ocho años, Marco Rubio, el senador por Florida que era la esperanza hispana del partido Republicano, ofreció su firme opositor al respecto.

"Si esta es la propuesta, está muerta antes de llegar al Congreso", aseguró el político de origen cubano. "Es un error para la Casa Blanca elaborar una legislación sobre inmigración sin buscar input de los miembros republicanos del Congreso", manifestó el joven legislador que en las últimas semanas está logrando bastante protagonismo político y que muchos piensan es presidenciable para la carrera por la presidencia de 2016.

Para Rubio, la propuesta del mandatario Barack Obama además "no es suficientemente dura" sobre la seguridad en las fronteras y de hecho recompensa a "quienes violaron la ley de inmigración" respecto a quienes "decidieron hacer las cosas bien y vinieron legalmente".

El plan de Obama, puesto en la página web del diario USA Today, motiva a que los indocumentados tengan la oportunidad de obtener la residencia permanente legal en el país en ocho años.

Eso ordenaría a los empresarios a realizar análisis en los próximos cuatros años el estatus migratorio de sus empleados, en tanto los 11 millones que están sin papeles tendrían que superar un control de antecedentes y realizar los pagos de las tarifas para aplicar para una visa nueva.