MIAMI - A pesar que en Estados Unidos el Día del Trabajador es celebrado el primer lunes de septiembre, los latinos radicados tomaron como excusa esta jornada para reclamarle al Congreso que se apruebe una reforma migratoria y derechos laborales para todos los trabajadores.

A través de asambleas y movilizaciones, activistas e inmigrantes de todas partes estaban reunidos en Los Ángeles, Nueva York, Washington DC y Miami (donde se concentran en su mayoría los latinos) para respaldar que se acepte la aprobación de una reforma migratoria.

"Creo que se necesita más este tipo de eventos", dijo Carlos Pereira, director del Centro de Orientación del Inmigrante (CODI), en referencia a la decisión de crear foros y "la presentación de historias personales", así como "la educación del inmigrante".

Pereira manifestó que el CODI mantiene sus esfuerzos en evitar el fraude a la comunidad inmigrante y "aconsejar a los indocumentados sobre cómo prepararse para la reforma migratoria, sobre todo en los papeles que deben tener listos y los requisitos" para hacer legales sus permanencias en Estados Unidos.

Para Mario Moreno, del Foro Nacional de Inmigración (NIF), "marchas como la del 1ro de mayo son fundamentales para que la comunidad se haga escuchar con sus representantes en Washington DC".

RAZA, la mayor organización hispana de Estados Unidos, hizo la solicitud días atrás a las comunidades inmigrantes a nivel nacional a contactar a sus congresistas y hagan el envío de mensajes para que voten a favor de la reforma migratoria.

Algo parecido fue el reclamo del grupo Reform Immigration for America, que abrió una página en Internet para enviar mensajes a los congresistas.

"Dile a tus líderes del Congreso ahora: su trabajo no ha terminado hasta que finalmente se apruebe una reforma migratoria integral que crea una hoja de ruta hacia la ciudadanía", está escrito en la página www.reformamigratoriaproamerica.org.

Para lograr legalizar a millones de indocumentados que están en Estados Unidos, y que no tienen los antecedentes penales, el gobierno de Barack Obama tendrá en primer punto cumplir con una serie de requisitos de seguridad. Uno de ellos es la detención del 90% del cruce de personas indocumentadas en las zonas de alto riesgo.

Para que se logre la reforma migratoria, se necesitan 218 votos en la Cámara de Representantes (controlada por los republicanos) y 60 en el Senado (demócratas).