Nicaragua refuerza las medidas sanitarias ante un brote de fiebre amarilla en 13 países de las Américas y el continente africano, anunció el Ministerio de Salud (Minsa).
Con el objetivo de salvaguardar la vida de los nacionales y los extranjeros que ingresan al país, el gobierno solicitará un control estricto, ante el repunte de la enfermedad en Brasil, según una alerta epidemiológica de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Todo viajero de más de un año de edad que vive en una nación en riesgo de transmisión de fiebre amarilla y que desee ingresar a Nicaragua, debe presentar certificado internacional de vacuna contra ese virus con fecha de aplicación de 10 días antes, informó el secretario general del Minsa, Carlos Sáenz.
Con una inmunidad efectiva ante la enfermedad, la vacuna se aplicará a los pinoleros que viajan a los países con riesgo, aseguró Sáenz, al recordar que desde finales del 2017 las autoridades sanitarias recomendaron adoptar medidas preventivas.
La OPS informó sobre pacientes infectados en Bolivia, Brasil, Perú, Ecuador, Guyana y Surinam.
La fiebre amarilla es una enfermedad vírica aguda, hemorrágica, transmitida por mosquitos infectados.