El presidente de Guatemala, Jimmy Morales fue recibido ayer jueves por el secretario de Estado Rex Tillerson, para hablar sobre asuntos bilaterales y regionales, luego de una breve reunión horas antes con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
La reunión de Trump y Morales, cerrada a los medios de comunicación, tuvo lugar en el hotel Washington Hilton, pero la Casa Blanca indicó en un comunicado que Trump agradeció personalmente a Morales el apoyo a varias de las políticas estadounidenses, entre ellas la designación de Jerusalén como capital de Israel y la decisión de mudar la embajada guatemalteca a esa ciudad.
Los dos líderes también discutieron la situación en Venezuela y acordaron trabajar juntos para restaurar la democracia en el país sudamericano.
El presidente Trump además subrayó la importancia de detener la inmigración ilegal a Estados Unidos desde Guatemala y abordar los desafíos subyacentes del país centroamericano en cuanto a la seguridad y la prosperidad.
Como parte de su visita, el presidente de Guatemala se reunió con legisladores estadounidenses el miércoles, entre ellos el senador republicano Marco Rubio.
A través de su cuenta de Twitter, el presidente Morales agradeció el respaldo recibido de los legisladores estadounidenses y señaló que conversaron de varios temas como la lucha contra la corrupción, narcotráfico, migración y desarrollo económico.
En antesala a esta reunión el senador Marco Rubio escribió en Twitter que esperaba la visita de un gran amigo refiriéndose al presidente guatemalteco de quien dijo ha hecho “un progreso real” en la lucha contra la corrupción y el narco terrorismo.
Morales llegó el martes a Washington para una visita de cuatro días en la que también irá a Nueva York para abordar temas del Plan para la Alianza de la Prosperidad, “apoyo al tema empresarial e inversiones para Guatemala”, además de la Agenda 2030, según adelantó el lunes la canciller guatemalteca, Sandra Jovel.