El saldo de su ataque fue de 17 víctimas mortales y al menos 14 heridos, cinco de los cuales se encuentran en estado crítico
Nikolas Cruz, el tirador que este 14 de febrero atacó con un rifle la escuela Marjory Stoneman Douglas Highschool de Parkland (Florida, EE.UU.), activó una alarma de incendios antes de comenzar a disparar a sus excompañeros.
Lo hizo con la esperanza de que los alumnos salieran de las aulas y de ese modo poder causar el mayor daño posible al disparar contra la multitud, sostuvo el senador Bill Nelson durante una declaración en el canal estadounidense MSNBC.
“[El agresor] tenía puesta una máscara antigas y llevaba encima varias granadas de humo. Activó la alarma de incendios para que los chicos salieran al pasillo y le fuera más fácil disparar contra las personas en multitud”, dijo el senador demócrata del estado de Florida.
Según declaraciones del sheriff Scott Israel, el tirador usó en su ataque un rifle AR-15 con mucha munición. Posteriormente trató de escapar de la escena del crimen mezclándose con la muchedumbre en fuga, añadió una fuente policial.
El AR-15 es un fusil de asalto de calibre 5,56 mm, que se fabrica en EE.UU. desde 1963. Se vende como un arma civil para defensa personal y cacería y es parte de la dotación regular de la Policía.
Las víctimas mortales del tiroteo, incluyendo adolescentes y personas mayores, son 17. De ellas, 12 fueron abatidas en el centro escolar, dos murieron fuera del instituto, una fue tiroteada en la calle y otras dos fallecieron en el hospital.
En total, 14 personas con heridas diversas se mantienen bajo atención médica en tres diferentes centros asistenciales del condado de Broward, sin contar al agresor.
Inicialmente fueron hospitalizadas 17 personas. Tres murieron y cinco se encuentran en estado crítico.