El dropshipping es una modalidad de comercio electrónico en la que los vendedores hacen la función de intermediarios entre el proveedor y los compradores.
Si emprendes un negocio con estas características, tu función será diseñar y administrar la tienda online. Cuando alguien realiza una compra en tu sitio, deberás hacer el pedido correspondiente al proveedor. Así que no tendrás que preocuparte por mantener un inventario físico de productos.
Los artículos que compres en el sitio del proveedor tendrán costos inferiores a los de tu e-commerce. Esto significa que tu ganancia corresponderá con la diferencia entre ambos precios. El proveedor despachará todos los pedidos a tu nombre. De esta manera, el cliente no se enterará que tú eres un intermediario.
Pasos para iniciarse en el mundo del dropshipping
Si dispones de una computadora con conexión a internet, tienes lo necesario para iniciar un negocio de dropshipping. Veamos cuáles son los pasos a seguir para conseguirlo.
Elegir un nicho de mercado
Lo primero que tienes que hacer es seleccionar es un nicho adecuado. Ten presente que los productos más solicitados por los clientes se venden en cientos o miles de sitios. Si decides comercializar algunos de estos, tendrás que superar a muchos competidores antes de que tu negocio comience a ser rentable. No decimos que hacer esto sea una misión imposible, pero requerirá de mucho esfuerzo.
Por su parte, hay portales que ofrecen artículos muy exclusivos, generalmente a un costo elevado. La competencia en este caso suele ser relativamente baja, pero también es una realidad que las ventas serán más esporádicas.
Por lo tanto, te sugerimos elegir un sector cuya mercancía no tenga demasiada demanda, pero tampoco muy baja. Para encontrar ese punto medio, deberás hacer una investigación minuciosa, lo que incluye determinar si existen proveedores en ese nicho que ofrezcan productos bajo la modalidad dropshipping. Eso nos lleva al siguiente paso.
Conseguir proveedores idóneos
En internet, puedes encontrar distintos proveedores que ofrecen los mismos productos. Conviene hacer tratos con varios de ellos a fin de asegurar un stock razonable de todos los artículos que comercializarás. Esto impedirá que tengas que disculparte con los clientes por no poder despacharles su pedido.
Ahora bien, no todos los proveedores son iguales. Los precios de sus ítems y plazos de entrega varían de una compañía a otra. Por consiguiente, deberás hacer una búsqueda cuidadosa para hallar al que ofrezca las condiciones más ventajosas para ti.
Asimismo, es muy importante verificar que los proveedores que eliges trabajan de manera profesional, enviando productos con prontitud y en buen estado. De lo contrario, las quejas y malas calificaciones de los clientes no se harán esperar.
Encontrar buenos proveedores no es tan difícil como crees. Solo tienes que leer las valoraciones otorgadas por los usuarios en sitios ajenos a la empresa en cuestión. Una simple búsqueda en un buscador que incluya el nombre del proveedor acompañado de expresiones como “opiniones”, “comentarios”, “revisión”, “calificación” u otras similares dará como resultado varias páginas con información valiosa.
Lanzar la tienda online
A continuación, deberás elegir y comprar un nombre de dominio adecuado para tu tienda en línea y contratar el hosting donde se alojará. Hecho esto, es momento de pasar a la fase de diseño. En la red, puedes encontrar plantillas para comercios electrónicos que te permiten lanzar de forma gratuita tu propio portal.
Sin embargo, lo más recomendable es crear un diseño personalizado, ya que eso te permitirá distinguirte de la competencia. Si no tienes conocimientos de programación, tendrás que contratar a un especialista. Se trata de una inversión de la que no te arrepentirás.
La mayoría de las tiendas online que existen hoy en día se apoyan en alguna plataforma de e-commerce que facilita la gestión de pagos y envíos, y disponen de herramientas de marketing y de fidelización de clientes. Tal es el caso de WooCommerce, Prestashop, Shopify, Magento y Drupal. Tras aprender a usar la herramienta en cuestión, estarás listo para publicar tu catálogo y comenzar a vender.
Algunos aspectos sobre el dropshipping que debes considerar
Por último, prestar atención a los siguientes factores te ayudará a iniciar tu negocio de dropshipping con el pie derecho.
Tu margen de ganancias por artículo no será muy amplio. Los proveedores casi nunca son los fabricantes de los productos que venden, la mayoría le compra a las fábricas. Al agregar un eslabón a la cadena de suministros, tu margen de ganancias se reduce. Si quieres ser competitivo, tu objetivo debe ser aumentar tu volumen de ventas, más bien que tus precios.
No todos los proveedores realizan entregas en tu zona geográfica. Si un proveedor se localiza lejos de tu zona geográfica, no será tu mejor opción. Incluso si realiza entregas al país o a los países donde tu tienda en línea ofrecerá cobertura, el costo de los envíos y los tiempos de entrega podrían anular cualquier otro beneficio que pudiera ofrecer.
Tendrás que construir tu reputación. Como cualquier tienda física o en línea, deberás posicionar tu marca antes de comenzar a generar ganancias aceptables. Para lograrlo, conviene invertir en publicidad. Además, tu atención al cliente debe ser impecable. Y eso requiere tiempo y dedicación.