Muchas preguntas surgen sobre el mundo post-covid. Y con la energía post-covid no es diferente. Las respuestas pueden no ser tan innovadoras, ya que muchos países ya se utilizan de energías renovables como fuente energética, económica y de preservación del medioambiente.
En Latinoamérica, por ejemplo, Bolivia avanza con el uso de la energía solar en áreas rurales y periurbanas del país. Esta iniciativa se suma a otras en todo el mundo, especialmente en países desarrollados, donde el tema ya es una realidad hace años ¿Pero la energía solar es la única solución?
Para Ermanno Traverso, referencia en el tema, la recuperación económica pasa por las energías renovables. “La fórmula energética del mundo post-covid será hidrógeno más energía eólica, una fórmula limpia y eficaz, capaz de garantizar un año de fuerte recuperación”, afirma.
En la visión de Traverso, los países que no utilizan energías renovables sufrieron más durante la crisis del COVID-19. “El menor consumo de energía ha pesado principalmente en aquellos países cuya economía aún se basa principalmente en los hidrocarburos, como México: al no poder vender petróleo, estos países se han visto obligados a limitar el consumo de energías alternativas y a utilizar crudo para no tirarlo”, dijo.
Por otro lado, países del norte europeo limitaron los efectos de la crisis gracias al uso extensivo de energías renovables. “Esto ha demostrado una vez más la mayor versatilidad de la economía verde y el hecho de que el cambio de paradigma energético es ahora no solo una elección acertada desde un punto de vista medioambiental sino también económico.”
Hasta las elecciones estadounidenses pueden beneficiar el escenario más ecológico en el 2021. “En este sentido, la presidencia de Biden seguramente jugará un papel positivo: Estados Unidos volverá a ser protagonista en el escenario de la economía verde y sin duda abrazará el plan europeo del hidrógeno”, declara Ermanno Traverso.
Energía post-covid enfrentará situación anormal
Para Ermanno Traverso, la energía post-covid vivirá desafíos inéditos. “El sector energético afronta el reto del 2021 en una situación anormal frente a otros sectores. Si es cierto que estamos en el inicio de un año muy difícil, también es cierto que el mercado energético solo ha sufrido una ralentización por la contracción de la demanda y no por una crisis estructural del sistema”, dijo.
Todavía, el camino para la energía post-covid lograr el éxito es claro: ser cada vez más verde, circular y digital. “Por supuesto, el nuevo escenario económico plantea ciertamente dificultades: la crisis de los minoristas y los grupos inmobiliarios, lejos de ser un fenómeno pasajero, representa en cambio el síntoma de una nueva fase evolutiva. Pero los grandes cambios siempre han sido causados por las grandes crisis y creo que 2021 será un año de cambios positivos.”