La vocera del gobierno sandinista, Rosario Murillo, informó ayer martes que siguen bajo monitoreo la evolución de 7 personas que están sospechosas de portar el COVID-19. Todas tuvieron contacto con el caso número dos confirmado como positivo la semana pasada.
El gobierno no ha brindado detalles sobre el seguimiento del primer caso, quien se creía socializó durante un par días con su familia, colegas y otras personas.
Murillo fue especialmente insistente al brindar información sobre el escandaloso caso del afectado número dos, guardando un total silencio sobre el hombre de 40 años que volvió de Panamá después de una visita de un fin de semana.
“Hay siete personas asintomáticas, sin síntomas, que tuvieron contacto con el caso número dos, o viajaron recientemente e ingresaron a nuestro país, por esa precaución extrema que debemos tener para protegernos”, dijo la vicemandataria en su comunicación telefónica.
“El Ministerio de Salud ha ubicado en seguimiento cercano, responsable, cuidadoso”, reiteró Murillo Zambrana.
Las críticas surgen a medida que ni Daniel Ortega ni Murillo han hablado de manera pública sobre la crisis del coronavirus en Nicaragua.
Comunicado del Minsa
Se han realizado pruebas del COVID-19 a Personas que lo ameritaban. Todas negativas.
Se mantienen los mismos dos casos positivos importados, que ya conocemos, con los dos Pacientes estables.
Hay 7 Personas en seguimiento digno, responsable y cuidadoso, todas asintomáticas.
Son Personas que, o tuvieron contacto con el caso número 2, o viajaron e ingresaron a Nicaragua, desde Países con brotes fuertes. Cumplimos con dar a cada uno, riguroso y protector seguimiento, a pesar de que hasta ahora, no presentan síntomas.
No tenemos ningún fallecido por esta causa.
En este momento no tenemos transmisión Local Comunitaria. Los contactos de los dos casos positivos, permanecen y permanecerán en seguimiento respetuoso, de acuerdo al Protocolo de nuestro País.