Ese dato histórico no lo conocíamos hasta que lo reveló el historiador Iván Pereira. La vida del poeta leonés, Salomón De La Selva (León, 1893- Paris, 1959) autor de los libros formidables “La Ilustre familia”, Canto a la independencia de México” y el icono de “El Soldado Desconocido”, que es la mirada de la Gran Guerra contada por un poeta centroamericano, fue muy prolífico como poeta, escritor, ensayista y político. Integró el grupo de Los tres Grandes. sin duda, un gran humanista.
Otros aspecto relevante fue su actuación y aporte en la diplomacia, como agudo consejero. Vale la pena, ahora que se aproximan los 59 años de su muerte recordar con precisión, la anécdota que desempolva Pereira. Manifiesta el historiador y economista que en sus últimos días de vida, Salomón De La Selva, servía como Embajador de Nicaragua en Francia. El jefe de la diócesis de León, era Monseñor y Dr. Isidro Ovuedo y Reyes. Se repatriaron los restos del intelectual y Anastasio Somoza Debayle, le pidió al prelado que fuese enterrado en la Catedral. Monseñor no quería poner a mal sus relaciones con el gobierno y dudaba hacerlo porque ” La ilustre familia” tiene una fuerte carga sensual y de erotismo. Ese era su aprieto, debido al dogma católico. Para salir del asunto, le escribió al Secretario de Estado del Vaticano, siendo en esa época, el Papa Juan XIII. Oviedo Reyes, creyó tener la excusa perfecta, juraba que le negaría la solicitud.
La respuesta fue de sorprendente remate. Juan XIII veía con gran agrado, que su amigo y consejero, el poeta Salomón De L Selva, fuera enterrado con todos los honores en la Catedral de León. El origen de semejante honor se debía que Juan XIII antes de ser elevado a silla pontificia había sido Embajador del Vaticano en Francia y había conocido y profundizado una intensa amistad con el poeta. Monseñor Oviedo y Reyes contaba muy contento esa anécdota, señala Pereira.