Los fuertes vientos procedentes del Pacífico Sur, sumado a la "inversión" en el régimen de mareas

Marcio Baca.
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Las autoridades de Nicaragua están atentas a fuertes mareas en la costa del Pacífico, que obligó a algunos habitantes a evacuar sus viviendas y a pescadores a suspender sus labores, según fuentes de la presidencia y de la vocera oficial Rosario Murillo. Al menos seis familias dejaron por propios medios sus viviendas en la zona de Padre Ramos, en del departamento noroccidental de Chinandega, donde el efecto de las mareas fue mayor, dijo la señora Murillo.
Otras nueve familias fueron evacuadas de las costas del municipio de El Viejo, mientras en el Puerto de Corinto, también en Chinandega, algunos negocios reportaron pérdidas por daños en sus instalaciones, se informó de fuentes gubernamentales.
El gobierno llamó a la población que habita en las zonas costeras o que visitan las playas, así como a los pescadores, a "mantener la vigilancia preventiva", aunque se espera que el fenómeno que afecta a toda Centroamérica disminuya el martes, dijo Murillo. Honduras, con costas en el Golfo de Fonseca, donde unas 6.000 personas fueron afectadas por las altas mareas el fin de semana, declaró el domingo una alerta verde por 72 horas.
Los fuertes vientos procedentes del Pacífico Sur en Centroamérica, y las altas mareas, provocadas por el surgimiento del fenómeno climatológico "El Niño", en el Golfo de Fonseca, afecta a Honduras y Nicaragua, dijo el subdirector de Fenómenos Naturales del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter), Marcio Baca, quien dijo que ese fenómeno se presenta normalmente bajo condiciones climáticas y atmosféricas del momento. Desde el pasado sábado, en las aguas del Golfo de Fonseca, compartido por Honduras, El Salvador y Nicaragua, en el océano Pacífico, los fuertes vientos y mareas altas inundaron casas de las costas hondureñas, y alcanzaron pequeños negocios turísticos nicaragüenses, sin provocar mayores daños.
Baca dijo que los fuertes vientos procedentes del Pacífico Sur, sumado a la "inversión" en el régimen de mareas, por la presencia del fenómeno climatológico de "El Niño", provoca los oleajes percibidos principalmente en Honduras, y el Golfo de Fonseca en Nicaragua. "El Niño produce este fenómeno cuando se invierten las circulaciones oceánicas empujando cierto acumulado de agua hacia las zonas costeras, y cuyas duraciones pueden ser de horas, y en algunos casos de días", enfatizó Baca.
Para el experto del Ineter, los pronósticos señalan que a partir del martes esta anomalía podría empezar a "disminuir" de acuerdo a la advertencia de los centros de pronósticos. Aunque, prosiguió Baca, la población debe adoptar medidas de precaución orientadas a través del gobierno. "Llamamos a tomar medidas pertinentes emitidas responsablemente por el gobierno, e informa a nuestra población de todos y cada uno de los fenómenos presentados en el país", precisó Baca.